sábado, 11 de febrero de 2023

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La J4 fue una de las furgonetas más populares en nuestro país. Desarrollada en 1960 por la firma británica Morris, se 
comercializó como Morris J4, Austin J4 y BMC J4. En el año 1965 aparece en el mercado español fabricada bajo licencia 
por SAVA (Sociedad Anónima de Vehículos Automóviles) en su planta de Valladolid.
La SAVA J4 era una furgoneta de 4 metros de longitud con una capacidad de carga de 850 kg. Su motor diésel de origen BMC 
tenía 4 cilindros con un cubicaje de 1.489 cm3 y una potencia de 40 CV (SAE). La caja de cambios contaba con 4 relaciones 
y la tracción era trasera. La suspensión delantera era de ruedas independientes y estaba equipada con muelles helicoidales, 
mientras que para el eje rígido posterior se recurría a las clásicas ballestas semielípticas. Ambos ejes contaban con 
amortiguadores hidráulicos.
En conjunto, la J4 era una furgoneta eficaz y económica, con una destacada maniobrabilidad y muy adecuada para labores 
de reparto en cualquier ámbito. Además, contó con diversas versiones (furgón, combi, furgón techo elevado o capitoné, 
plataforma, chasis cabina y microbús) que la hacían apta para cualquier actividad o negocio.
 
 
SAVA J-4 
Las primeras unidades fabricadas en Valladolid adoptan la denominación de SAVA-Austin J-4 con el emblema de BMC en el frontal. La J-4 española es técnica y estéticamente casi idéntica al modelo británico con la salvedad de la opción de un motor de gasolina que no se ofrece en nuestro país y sí en el país de origen.
En el año 1966 ENASA se hace con la mayoría de las acciones de SAVA, de manera que con las J-4 la empresa estatal pasa a contar en su catálogo con una gama de vehículos ligeros. En 1968 se sustituye el motor BMC por una unidad nueva con unas características similares pero con un aumento de la potencia desde los 40 CV a los 46 CV (SAE).
Una opción bastante peculiar en el mercado español era la posibilidad de montar puertas correderas en la cabina de las versiones furgón. No cabe duda que para el reparto urbano una puerta corredera es más práctica que una batiente a la hora de bajar y subir entre el tráfico o en lugares angostos.
 
 

SAVA J-4 Serie 5730
En 1974 se modifica profundamente la parte delantera con formas menos redondeadas, con una calandra negra que ocupa todo el frontal. En esa calandra se alojan las ópticas delanteras, con los faros que ahora son rectangulares, y un conjunto intermitente-luz de posición, además del emblema de Pegaso. En la parte trasera se van a sustituir, unos meses más tarde, las ópticas por unas más alargadas y modernas. Otro cambio importante aparece en las ventanillas delanteras, que pasan a ser de tipo descendente en vez de correderas. Todas estas modificaciones dan una personalidad propia a la J-4 española.

Con esta Serie 5730, en el año 1977, el fabricante desdobla la gama en dos modelos en función de su carga útil, la J-4 700 y la J-4 1000. La primera monta el motor de 1.489 cm3 que desarrolla 38 CV (ISO) y ofrece un carga útil de 700 kg, con un peso máximo autorizado de 1.930 kg. Por su parte, la J-4 1000 equipa un nuevo motor de cuatro cilindros de 
1.794 cm3 y 50 CV (ISO) de potencia. El peso máximo autorizado es de 2.225 kg y la carga útil se sitúa entre los  
950 y 995 kg, según la versión.


En 1979 la J-4 experimenta algunos cambios: los limpiaparabrisas pasan de la parte alta de la luna a la zona inferior, los intermitentes laterales circulares se cambian por otros rectangulares, las ventanillas de las puertas traseras crecen en tamaño y aparecen unas molduras de goma que protegen la carrocería. También se actualiza profundamente el interior. Con la gama del 79 se cambia la denominación de los modelos, que pasan a ser J-4 800 y J-4 1100, ya que hay un pequeño incremento de la carga útil.
La J-4 800 se ofrece en versiones furgón, combi y capitoné. Para la J-4 1100 hay más versiones: furgón, combi, capitoné, capitoné-combi, chasis-cabina, plataforma y microbús. El modelo furgón tiene una capacidad de 5 m3 y el furgón de techo elevado (capitoné) alcanza los 6,5 m3


PEGASO J-4
En 1982 desaparece la marca SAVA y las J-4 se convierten en Pegaso J-4. El modelo para 1.100 kg de carga útil, 
con el motor 9731.10 de 1,8 litros monta de serie una nueva caja de velocidades con cinco marchas, aunque se 
mantiene la opción de la caja de cuatro relaciones. La J-4 800, con el motor 9720.11 de 1,5 litros equipa la caja de 
cuatro velocidades. Otra novedad técnica es la adopción de frenos de disco en el eje anterior.


Con el lanzamiento de las series de camiones T1 (en 1983) y Tecno (en 1985) las Pegaso J-4 adoptan también la 
imagen que muestran sus hermanos mayores, de manera que aparecen versiones con zonas de la carrocería 
pintadas en negro ribeteadas con franjas de colores rojo y naranja; y posteriormente, con la carrocería blanca y 
bandas con dos azules diferentes en el estilo propio de la gama T2.
En 1987 ya no se ofrece el modelo inferior y la gama se compone solamente de la J-4 1100. A finales de 1988 cesa 
la producción de la J-4 y es sustituida por la Pegaso Ekus.

1 comentario:

  1. Que maravilla. En mí pueblo, turronero, existían multitud de SAVAS. Blancas, amarillas, naranja. Gran cantidad de familias, ahora ya menos, se dedicaban a la venta del turrón por pueblos, mercados, ferias... y uno de los vehículos que utilizan era este. Éste, y la Pegaso Cosmos. En su interior, a parte de llevar su mercancía, las esposas se encargaban de "acondionarlas", tejiendo cortinas para tapar las ventanas y haciendo en muchos casos, sábanas para una pequeña cama que también portaban. Otros tiempos, otra época, que con esta entrada me ha llevado a recordar.

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